Los hogares de los ciudadanos europeos representan el 40% del consumo total de energía que se produce en Europa, dato que deja muy claro la importancia de conseguir la transformación a los hogares inteligentes para realizar un uso más óptimo de los recursos que consumimos y que no son ilimitados.
Junto a este propósito de desarrollar las Smart Cities con la integración de una iluminación eficiente y sostenible, se una la necesidad de buscar la una iluminación mejor orientada a la actividad del ser humano y su bienestar. Cumpliendo así, uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU: ciudades y comunidades sostenibles.
Estos grandes retos son los que mueven a Televés a seguir desarrollando soluciones tecnológicas que cubran las necesidades actuales y ayuden a crear un mundo más responsable en cuanto al gasto energético.
Para ello, la tecnología LED se presenta como la tecnología seleccionada en el ámbito de la iluminación que aporta grandes beneficios al bienestar del ser humano y del planeta.
Según datos recogidos por los centros de investigación de las principales universidades, como Harvard, cada vez son más los factores relacionados con el consumo energético y la iluminación que impactan directamente sobre la sociedad y el desarrollo de las ciudades.
Por un lado, la concentración de la población en grandes ciudades no para de aumentar y se espera que para el 2050, un 60% de la población habite en grandes urbes; con su consecuente efecto sobre la gestión de los recursos y la organización de los servicios a los ciudadanos.
Por otro lado, según expone la Escuela de Medicina de Harvard tras varios estudios, la población que habita en grandes zonas urbanas pasa un 90% de su tiempo en espacios cerrados; lo que implica que están solamente expuestos a luz artificial que afecta a su salud, bienestar y estado anímico.
Esto conlleva que cada vez es más relevante que la iluminación artificial se comporte como la iluminación circadiana, es decir, que la luz a la que estamos expuestos se adapte a los ciclos naturales y biorritmos de los seres humanos.
Este panorama es el que hace que los expertos en desarrollo de soluciones tecnológicas se planteen la forma de mejorar la vida de las personas en las ciudades con ayuda de una iluminación inteligente y regulable. Y, actualmente, la iluminación LED se presenta como la mejor tecnología para afrontar estos retos y aportar beneficios en los diferentes aspectos socioeconómicos.
La iluminación LED apuesta por el ahorro económico y energético por su alta eficiencia en el consumo, su larga vida útil y el ahorro que consigue frente a otros tipos de iluminación tradicional.
Los LED son sistemas de iluminación regulables, lo que facilita que la intensidad de la luz se adapta a las necesidades del momento, así como que cuente con un sistema más eficiente para la gestión térmica del calor emitido, sin que este afecte al entorno y al bienestar de los ciudadanos.
La innovación de la tecnología LED permite que se comporte como una luminaria inteligente en su intensidad, encendido y apagado y con una regulación automática que facilita que la luz se adapte a cada momento del día o actividad, sin disparar el consumo o afectar a la vida útil de los sistemas.
Esta luminaria inteligente es además capaz de proporcionar datos que convenientemente tratados nos ayudarán en el mantenimiento, incluso mantenimiento preventivo, de la instalación.
A la hora de dar inteligencia a las luminarias, el principal problema que debemos resolver es la conectividad. ¿Cómo conectamos una red de miles de puntos distribuidos en el entorno de un término municipal?. El sistema debe ser evidentemente fiable, pero también sostenible.
Hay distintas soluciones: PLC , Lora, Zigbee, Bluetooth Mesh, 2G/3G, y ahora NB-IoT. No creemos que ninguna de ellas se vaya a imponer de forma absoluta. Todas ellas cuentan con ventajas e inconvenientes, por lo que debe ser un profesional el que estudie el caso concreto y proponga la mejor solución para cada escenario. Por esto nuestra luminaria es conectable a cualquier sistema de telegestión a través de su interfaz NEMA.
Y unido a esto, genera entornos con una iluminación artificial que emula mejor a la luz natural y repercute positivamente en el bienestar de las personas que desarrollan gran parte de su jornada en edificios o naves industriales, exponiéndoles a una iluminación adaptable, sin emisiones de calor, ni infrarrojos o interferencias electromagnéticas. Sin olvidar la calidad del color y el espectro ofrecido por las luminarias LED.
Estas ventajas de la iluminación LED la convierten en la mejor solución para renovar alumbrados públicos o invertir en soluciones de iluminación profesional que mejoren la productividad, la eficiencia energética y el entorno en el que trabajan las personas.
Televés sigue desarrollando nuevos sistemas de iluminación más ecológicos, partiendo de los beneficios que aporta la iluminación LED e investigando en nuevas soluciones para espacios abiertos, zonas viales o espacios interiores dedicados a actividades profesionales o de ocio. Y todo ello concibiéndola como una iluminación orientada para el ser humano que habita estos espacios.
Por ahora, los beneficios de la iluminación LED para el bienestar del ser humano y la mejora de la sostenibilidad hacen que ya sean muchas ciudades españolas y empresas privadas las que se decidan por invertir en esta tecnología para dar un paso más hacia la ciudad inteligente y contar con sistemas automatizados para la mejor gestión de los recursos.
Y no hay mejor manera de comenzar a construir las ciudades del futuro que con ayuda de tecnologías que fomenten el ahorro y la sostenibilidad, al mismo tiempo que se orientan hacia el bienestar de las personas.