Los hoteles con inteligencia artificial han pasado de ser proyectos a futuro para convertirse en una realidad palpable a la que cada vez se le está prestando más atención. Ofrecen multitud de ventajas tanto para el propio establecimiento como para los clientes que se alojan en él. De hecho, dichas ventajas se han incrementado aún más debido a las soluciones que ha ofrecido en la reciente crisis sanitaria. Es por ello que, desde Televés, queremos mostrarte algunas de las claves de contar con una infraestructura que permita ofrecer este tipo de servicios.
Una de las principales ventajas de los hoteles con inteligencia artificial es la gestión de los servicios que ofrece. En este sentido, los hoteles que cuentan con este tipo de tecnología no solo consiguen una mayor eficiencia, sino que lo hacen adaptándose a cada cliente. Algunos ejemplos de ello los vemos a la hora de reservar un determinado servicio del hotel, pudiendo ver su disponibilidad en tiempo real o consultar la posible existencia de restricciones de aforo en zonas comunes. Todo ello adaptado al idioma, necesidades y preferencias del cliente, lo que hará que dicho servicio tenga un grado de personalización mucho mayor, pudiendo incluso hacerse por voz.
Gracias a las redes ultrarrápidas, este tipo de servicios contarán con tiempos de respuesta bajos y agilizarán todos los procesos de reserva o de consulta sobre algún aspecto del hotel. De esta forma, se logra alcanzar una mayor satisfacción por parte del cliente a la par que se optimizan los recursos del hotel.
Los hoteles con inteligencia artificial ofrecen otra gran ventaja frente a las opciones de administración más clásicas. Dicha ventaja es la de generar un menor impacto a nivel ambiental. Por un lado, encontramos el análisis continuo de variables y el aprendizaje sobre los hábitos de consumo para optimizar el gasto energético en tiempo real.
Por otro lado, otro recurso que también podría gestionar y en el que marcaría un cambio significativo es en la gestión del agua. Analizar y controlar su gasto tanto en las zonas comunes como en las habitaciones, consigue disminuir costes al hotel a la vez que disminuye su impacto medioambiental. De hecho, esta tecnología podría incluso advertir en tiempo real sobre fugas en el suministro de agua. Estas conllevan un gran desperdicio de agua, tiempo y dinero por parte del hotel, pero con este sistema podrían ser rápidamente advertidas y reparadas. Es por ello que son una solución muy interesante, pues permite tratar a tiempo problemas en el suministro o el sistema de tuberías.
Sin duda, un control sobre el consumo energético y sobre el agua del hotel mediante la inteligencia artificial, ahorra costes a nivel económico y crea soluciones más sostenibles en diversas áreas.
Una vez creada la infraestructura de red necesaria para desplegar la inteligencia artificial en el hotel, las posibilidades de personalización por parte del huésped se vuelven enormes. Por un lado, dicha infraestructura permite ampliar y mejorar el internet de las cosas. De esta manera, se pueden regular a través de internet prácticamente todos los elementos de la habitación e incluso controlar el propio consumo.
Por otro lado, ofrece opciones de diferenciación frente a la competencia como el reconocimiento facial. Este le da un toque distintivo al hotel, mientras convierte los procesos de check-in o check-out en una gestión mucho más rápida. Esto, a su vez, evita colas y aglomeraciones en zonas comunes. En resumen, esta tecnología logra crear de esta manera entornos más únicos a la par que seguros.
El coste asociado a los hoteles con inteligencia artificial es el de tener que contar con una infraestructura de redes adecuada para sustentar el ecosistema de la inteligencia artificial. Aunque, en un primer momento, sea necesario un desembolso para adecuar el hotel a dicha infraestructura, lo cierto es que esta consigue obtener un ahorro tanto a medio como a largo plazo.
Por un lado, este tipo de tecnología puede llevar a un ahorro sustancial a nivel energético para el hotel. De esta manera conseguirá abaratar sus costes fijos y optimizar sus recursos. Por otro lado, uno de los aspectos más interesantes de implementar esta infraestructura es el relacionado con los anuncios o servicios personalizados para cada cliente.
En este sentido, los hoteles con inteligencia artificial podrían introducir en sus instalaciones banners adaptados a las preferencias y gustos del cliente. Estos serían mucho más orgánicos para los huéspedes e, incluso, podrían generar ingresos extra a un establecimiento.
Invertir en este tipo de tecnología hoy en día es una apuesta segura por el ahorro energético, por la optimización de los servicios y por la disminución de la huella ecológica. Los hoteles con inteligencia artificial son, por tanto, el futuro del sector turístico.